LA PANDEMIA: RETOS Y OPORTUNIDADES PARA LOS ARCHIVOS (Primera de dos partes)

Por Luz Stella Camargo.

A finales de 2019 apareció el coronavirus. Se propagó rápidamente hasta convertirse en una epidemia conocida como COVID – 19, la cual se extendió por todo el mundo, habiendo sido declarada una pandemia global por la Organización Mundial de la Salud. El 20 de marzo de 2020, por instrucciones de la Secretaría de Administración, el Archivo General del Estado de Oaxaca debió cerrar sus puertas de manera temporal y entrar en cuarentena, sin por ello dejar de realizar sus tareas esenciales y llevar a cabo trabajo a distancia, desde el confinamiento de sus trabajadores en casa. Para el regreso paulatino se establecieron y aplicaron protocolos y se acordó hacer guardias de trabajo. Posteriormente se adoptó un esquema 14 x 14, es decir, la mitad del personal del archivo asiste dos semanas y la otra mitad otras dos, con el objetivo de mitigar y disminuir los riesgos de contagios. Los departamentos de Conservación y Restauración, así como el de Reprografía, entre otras unidades, continuaron trabajando de manera híbrida, según las prioridades y las necesidades, sin dejar de atender la demanda de servicios. Preservar la salud de los colaboradores en estos dos años, sin descuidar las tareas permanentes y sustantivas del Archivo General ha sido un reto formidable, que también ha brindado nuevas oportunidades, a pesar de los innegables obstáculos.

Luces y sombras en el edificio del AGEO.

En parte, ello se debió a que el 3 de abril del 2020, la UNESCO publicó la Declaración: “Convirtiendo la amenaza del COVID-19 en una oportunidad para un mayor apoyo al patrimonio documental”, la cual tuvo como objetivo fundamental apoyar la labor de las instituciones de archivo, al orientar y aclarar los vínculos conceptuales y prácticos entre la preservación del patrimonio documental y la salud pública y la gestión de las pandemias, sin dejar de impulsar para ello la necesaria solidaridad internacional. Dicha declaración estuvo firmada conjuntamente por la UNESCO, la Federación Internacional de Asociaciones de Bibliotecarios y Bibliotecas (IFLA), el Consejo Internacional de Archivos (ICA), el Centro Internacional de Estudios de Conservación y Restauración de los Bienes Culturales (ICCROM), el Consejo Internacional de Museos (ICOM) y el Consejo de Coordinación de las Asociaciones de Archivos Audiovisuales (CCAAA), entre otros.

Capacitación en línea.

Jorge Álvarez, exposición virtual “Las bebidas alcohólicas en el Estado de Oaxaca”.

En dicha declaración se destacan 4 puntos:
1. Ampliar la cooperación nacional e internacional en la preservación y accesibilidad del patrimonio documental.
2. Los Estados miembros deben aumentar la inversión en la preservación y la accesibilidad del patrimonio documental, sin reducir sus servicios, teniendo una correcta gestión de los riesgos.
3. Resaltar la importancia de que las instituciones responsables de la memoria sean más accesibles para los ciudadanos, los tomadores de decisiones, los investigadores, los encargados de formular políticas, los profesionales de los medios de comunicación, los científicos y la comunidad en general.
4. Alentar a las personas, a los encargados de formular políticas y la comunidad científica para que aprecien el valor del trabajo que se realiza en los archivos y la utilidad de las instituciones de archivo como poseedoras de la memoria del mundo en todas sus manifestaciones, incluidas las pandemias y la respuesta del mundo ante ellas.

Publicación del artículo de Zaria Fuentes, sobre el aborto.

La UNESCO instaba también a llevar un registro completo de la evolución de la pandemia, para prevenir otros brotes en el futuro y gestionar mejor el impacto de estos acontecimientos mundiales en la sociedad. También solicitó el que se crearan archivos sobre la pandemia por ser esta un proceso histórico que debe ser escrutado como lo fue la peste española, las epidemias de cólera o viruela y otros grandes acontecimientos.

Continuará…