LA IMPORTANCIA DE LA LIMPIEZA GENERAL DE REPOSITORIOS Segunda parte.

Por Rosa Ángela Flores González.

Plagas más comunes en archivos

Algunos insectos también atacan la celulosa, en el papel y cartón, por ejemplo, y las proteínas en el pergamino y el cuero. Como los pececillos de plata o lepismas, los psócidos (también conocidos como piojos de libros) se encuentran entre las plagas más comunes. Los pececillos de plata pueden tener hasta 12,5 mm de longitud; se alimentan del apresto del papel, le abren huecos (especialmente al papel lustroso) y dañan tanto las encuadernaciones de los libros como el papel tapiz para llegar a los adhesivos subyacentes.

Muchas plagas que atacan a los libros también viven en la suciedad y en los residuos que se acumulan en lugares de difícil acceso dentro de los edificios. Las acumulaciones de pelusa, que se compone de desechos orgánicos, proporcionan la fuente de alimento para polillas y larvas de escarabajos. Es entonces cuando pueden propagarse a las colecciones.

Pececillo de plata.

La acumulación de polvo también proporciona una atmósfera hospitalaria para las plagas. Los insectos muertos o sus desechos pueden atraer a otros insectos. La suciedad y el desorden también dificultan la observación de las plagas, por lo que el problema puede pasar desapercibido por algún tiempo. El control de la infestación de insectos requiere eliminar en la medida de lo posible, estos hábitats potenciales y fuentes de alimentos, la buena limpieza es vital para evitar que los insectos se establezcan dentro del edificio.

Limpieza de repositorios

Por otro lado, entre los materiales utilizados y más útiles para la limpieza de los repositorios está la aspiradora con depósito de agua, siendo una de las mejores para limpiar desde techos, paredes, pisos, estantes, hasta los documentos y libros, así como los contenedores de los documentos. La aspiradora con depósito de agua, puede usarse hasta en los casos de ataque biológico de hongos, ya que lo que aspiran permanece en el depósito de agua del aparato y se elimina directamente. Por ello se considera un material aliado de la conservación preventiva.

Dentro de los principales accesorios utilizados en la aspiradora se encuentran; tubos extensores, tubos curvos para cepillos, cepillos grandes para aspirar paredes y pisos, cepillos chicos redondos para aspirar techos, tuberías y lámparas, boquillas anchas para el aspirado de las cajas contenedoras. Se utilizan además otros materiales como trapos secos, fibras para lavar los contenedores de las aspiradoras, cepillos para lavar las canastillas, y toallas semidesechables azules (shop towel), para secar. Se recomienda evitar el abuso de agua, lejía y detergentes abrasivos. Además, no se deben utilizar escobas, ya que transportan el polvo y la suciedad a otra zona del depósito.

Limpieza con aspiradora en estantería de repositorios.

Aspirado de cajas AG12 en repositorios.

La actividad que se realiza en el AGEO, es una acción que se trabaja en equipo con personal calificado, el cual usa equipo de protección adecuado el cual consta principalmente de un overol tyvek por persona, mascarilla, guantes, cofia y lentes de protección.

La limpieza de los repositorios se inicia con la limpieza de los pasillos exteriores, con aspiradora para no esparcir el polvo al interior de los repositorios, ya que los pasillos al estar expuestos al aire libre, acumulan una cantidad elevada de polvo e insectos.

La limpieza de los repositorios es una tarea vigilada y realizada por el personal, así también se ha de aplicar, paralelo a ello, la desinsectación y como parte de la conservación preventiva métodos de control, como el monitoreo ambiental y control de plagas, los cuales son actividades que se realizan en los repositorios de manera constante y que han permitido mantener las condiciones adecuadas que permitan seguir salvaguardando la memoria nacional.

Conservar es tener pasión por la historia y un fuerte compromiso con la comunidad, convirtiéndonos de esta manera en los guardianes de la memoria.

Repositorio limpio.