CONSTRUCCIÓN DEL TEATRO CASINO LUIS MIER Y TERÁN.

Por Abraham Said Santos Hernández.

Uno de los edificios más emblemáticos del estado, es sin duda el Teatro Macedonio Alcalá, ubicado en la esquina de Independencia con Armenta y López; pero no siempre se llamó así, el primero de sus nombres fue Teatro-Casino Luis Mier y Terán, en honor al militar y ex gobernador de Oaxaca.

La construcción del Teatro-Casino Luis Mier y Terán, fue impulsada por la elite oaxaqueña que buscaba por una parte, convertir a la ciudad como un referente cultural, donde pudieran presentarse grandes espectáculos teatrales, que a su vez favorecerían sus relaciones sociales, y por otro lado, el proyecto arquitectónico ubicaría a Oaxaca a la altura de otras capitales del país.

Fue el ingeniero Rodolfo Franco Larráizar, originario de la Ciudad de México, quien en 1902, envío personalmente al gobernador el proyecto para la construcción del teatro. Su propuesta fue aceptada y la construcción comenzó en el año 1903, año en que fuera nombrado ingeniero del Estado por el entonces gobernador Emilio Pimentel. Inicialmente, la construcción estuvo a cargo de la Sociedad Anónima “Teatro-Casino Luis Mier y Terán”, la cual contaba con distintos inversionistas. Para la construcción fueron comprados tres predios y las casas que existían fueron derribadas.

Periódico Oficial donde se autoriza la construcción del Teatro Casino.

Dado que la obra requería una gran inversión de recursos se buscó la participación del Gobierno, lo cual derivó en la publicación en el Periódico Oficial del 21 de noviembre del año 1906, el Decreto número 7, lo siguiente:

“Artículo 1°. Se autoriza al Ejecutivo para adquirir el terreno y construcciones que en él existen del “Teatro-Casino Luis Mier y Terán”, perteneciente a la Sociedad Anónima que lleva el mismo nombre, así como todo su activo y para listar dichas propiedades entre los bienes del Estado.”

En los artículos 2° al 4° menciona el capital y los plazos en que se pagará a los inversionistas.

“Art. 5°. Se autoriza al Ejecutivo para que al celebrar con la Compañía del “Teatro-Casino Luis Mier y Terán, S.A.,” el contrato a que se refieren las cláusulas anteriores contraiga la obligación de concluir dicho Teatro en un plazo no mayor de dos años, e invirtiendo para ello una cantidad no menor de ciento cuarenta mil pesos ($140,000.00 cts.)”

Entrega de inventarios, planos y materiales al Ing. Rodolfo Franco.

Acta donde los ayuntamientos aceptan entregar sus fondos.

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Más adelante, se hace entrega de los planos, sitio, materiales, herramientas y útiles que pertenecían, hasta ese momento, a la Compañía a cargo de la construcción, así como al ingeniero Rodolfo Franco, en tanto se hace entrega de la Escritura Pública correspondiente. Se encuentra firmado al calce por Jacobo L. Grandison, presidente del Consejo de Administración de la compañía, al ingeniero Rodolfo Franco y Manuel Soto, representando a la Tesorería General. En él, se detallan las características del inmueble, cuya superficie es de 1785 m2, y se menciona que colindaba al oriente con la casa de la señora Rosa Gamboa de Suárez, al sur con la casa de las señoras Josefa Tejada de Zorrilla, María Zorrilla de Yllescas y Juana Zertuche de Zorrilla y señores José, Enrique y Alfonso Zorrilla; al poniente con la calle Armenta y López y al norte con la calle Independencia. Menciona que todos los muros fueron construidos de mampostería de piedra sobre una capa de concreto, tal como les indicaban los planos, y también muestra que la altura de dichos muros era de 6.50 a 7.30 m, alcanzando la altura del primer piso.

La inversión que debía hacer el Gobierno era de tal magnitud, que se solicitó a los Ayuntamientos que tuvieran fondos improductivos en el Monte de Piedad, invertir dichas cantidades en el proyecto, y a cambio, se les darían réditos del 3% durante la construcción y del 6% anual, una vez concluida la obra. Así, diferentes Ayuntamientos enviaron el acta de conformidad con la utilización de sus fondos existentes en el Monte de Piedad.

La idea del ingeniero Franco de posicionar el Teatro como una obra emblemática, tanto cultural como arquitectónicamente, lo llevó a implementar técnicas novedosas, como la utilización de estructuras de hierro que estuvieron a cargo de la Compañía “Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey S.A.”, a quien se le pagaron $30,000.00 por la construcción de la estructura metálica del Teatro. Esta estructura compondría: un techo para cubrir el salón y el foro, cinco trabes para telares, un armazón para cuatro pisos de palcos y galerías, el esqueleto para la cúpula y dos tragaluces para las escaleras de acceso. Vemos en la minuta de este contrato que el ingeniero especifica que deberán respetarse rigurosamente sus planos.

El Teatro debía tener instalaciones de primer nivel, que podemos observar en las compañías contratadas. Tal es el caso de las instalaciones eléctricas, sistemas contra incendios y humedad que estuvieron a cargo de la “Arthur Frantzen Company de México A.C.” Éstas tuvieron un costo de 10,000.00 pesos que fueron entregados en dos partes, una al iniciar las obras y, la otra, al finalizar la instalación completa.

Parte del contrato con la compañía Fierros y Aceros de Monterrey S.A.

La gran inversión realizada dio como resultado un majestuoso recinto, con claras influencias europeas, como los ornamentos que evocan el estilo barroco y las grandes construcciones parisinas, las cuales influenciaron el periodo porfirista. Finalmente, el 5 de septiembre de 1909, fue inaugurado el Teatro-Casino Luis Mier y Terán.

La primera obra que se presentó fue la obra “Aida” de Giuseppe Verdi, dirigida por una compañía italiana de Miguel Sigaldi, con lo que se vuelve evidente que el recinto favorecía a un estrato social, el cual podía darse el lujo de asistir a obras de compañías internacionales. Dado que las élites demandaban espectáculos, comenzaron a proyectarse películas con música en vivo; una vez iniciada la Revolución, siguieron organizándose eventos. Es en este periodo, cuando el Teatro fue nombrado, por los carrancistas, “Jesús Carranza”, en honor al hermano de Venustiano Carranza, ya que el edificio sirvió como sede para su toma de protesta como gobernador. Años después logran devolverle su nombre de “Teatro-Casino Luis Mier y Terán” y es hasta la década de los años treinta, que se le da el nombre de Teatro Macedonio Alcalá, en honor al músico y compositor, el cual conserva hasta nuestros días.

El Teatro Macedonio Alcalá es ahora uno de los más bellos y emblemáticos recintos que nos ofrece nuestro Estado, un recinto de expresiones culturales que está abierto para todo el que busca acercarse a la historia del Estado, no solo es un atractivo turístico, es testigo del crecimiento y evolución del Estado y del desarrollo de nuestra historia.

Los invitamos a conocer más del pasado de nuestra entidad, indagando en los documentos históricos que se encuentran resguardados en el Archivo Histórico Central del AGEO, ubicado en la Calle Los Pinos, esquina Av. Canteras S/N, Agencia Municipal Santa María Ixcotel, Santa Lucia del Camino, Oax., donde estaremos gustosos de recibirlos y atenderlos.