BIODETERIORO EN EL PATRIMONIO DOCUMENTAL

Por Enrique Gúzman Leyva.

Dentro de las causas de biodeterioro en el patrimonio documental, la más común es: el ataque de insectos. A continuación veremos algunos de los daños más comunes, su identificacion, control y erradicación.

La proliferación de insectos requiere de ambientes oscuros, sucios y con muy poca ventilación; aquellos que implican mayores riesgos para la conservación de los materiales son denominados genéricamente “xilófagos” (pececillo de plata, termitas, cucarachas entre otros). El daño que ocasionan es la pérdida de información en los documentos, ya que se alimentan de los compuestos orgánicos que intervienen en la factura del papel y de los libros.

El principal deterioro encontrado en los soportes históricos es la presencia de galerías, es decir, los surcos que dejan los insectos, desde pequeños orificios hasta canales que atraviesan volúmenes completos.

Deterioro por termita.

Estos daños silenciosos pueden ser prevenidos si se detectan a tiempo, a partir de las revisiones periódicas del estado de conservación de los acervos y sobre todo, si se cuenta con las condiciones ideales que promuevan su conservación durante consulta y almacenamiento.

Aspectos a tener en cuenta para la identificacion del insecto:

• Presencia del insecto en cualquiera de sus estadios (larva, pupa, ninfa, adulto).
• Cadáveres de los insectos que afectan.
• El tipo de daño que cada insecto provoca a los documentos.
• Presencia de sus nidos.
• Presencia de sus heces.

Deterioro por escarabajo.

Control y erradicación.

Los métodos más utilizados en el proceso de desinsectación son los químicos, los cuales deben manipularse siempre de manera cuidadosa y siguiendo las recomendaciones del especialista a cargo, así como las normas que regulan las aplicaciones de estos productos. Los tipos de tratamiento utilizados se pueden clasificar de acuerdo a su naturaleza química (organofosforados, organoclorados, carbamatos, piretroides); por su especificidad de organismo (bactericida, fungicida, insecticida, rodenticida, hormiguicida); por mecanismo de acción (por contacto, por inhalación, fumigantes, por ingesta); por formulación (polvos humectables, concentrado, granulado, entre otros); hay que tener muy en cuenta el nivel de toxicidad para las personas e inocuidad para los materiales documentales.

En este sentido, el AGEO cuenta con un protocolo de conservación que contempla medidas preventivas y de control aplicadas en cada proceso y/o actividad que se realiza. Con la finanlidad de garantizar la preservación del patrimonio documental del Estado y promover la consulta entre las personas de la comunidad oaxaqueña.