Por: Liliana Pérez Velasco
Uno de los personajes más reconocidos e influyentes en la historia del Estado de Oaxaca y del país ha sido Benito Juárez García, quien ocupó distintos cargos en el gobierno y llegó a ser presidente de México. Mucho se ha estudiado ya la vida y obra de esta ilustre personaje, sin embargo, una etapa superficialmente abordada ha sido su trayectoria en el extinto Instituto de Ciencias y Artes del Estado, donde se encuentra evidencia de que es ahí donde de construye su ideología política. Es por esto que en el presente artículo se señalarán algunas de sus actividades dentro del referido instituto, las cuales pueden constatadas con documentos que se encuentran en el Archivo Histórico del AGEO.
Entre los documentos existe una lista fechada el 31 de Octubre de 1832, sobre algunas cátedras que se impartían en el Instituto de Ciencias y Artes, entre ellas: Derecho canónico, Derecho Civil, Derecho Público, Medicina, Lógica, Gramática, Dibujo y Física. En esta última destaca su titular Benito Juárez como responsable de impartirla. Posteriormente supimos que también tuvo a su cargo las cátedras de Derecho canónico y Derecho Civil.
Otro expediente que cuyo análisis podría ser pertinente en otro espacio, es un dictamen del 10 de mayo de 1836. En el que queda registrada una sesión para conformar el Ilustre Claustro Académico Ambo Jurista del Instituto de Ciencias y Artes. En el expediente se nombran a todos los integrantes de dicho claustro, Doctor Juan José Quiñones, Regente de la Corte de Justicia del Departamento y Catedrático Interino de Derecho Civil; Licenciado Luis Paulino Castellanos, Cura de la Santa Iglesia Catedral y catedrático de Derecho Civil en el Colegio Seminario; Licenciado Francisco Ignacio Mimiaga, quien en el documento no ostenta cargo alguno; Licenciado Aurelio Bolaños, Ministro de la Corte de Justicia; Licenciado Antonio Mantecón, Canónigo de la Santa Iglesia Catedral y Secretario de Gobierno de la Mitra; Licenciado Tiburcio Cañas, Asesor Cesante y por último, el Licenciado Benito Juárez, Catedrático de Derecho Canónico. Ellos son quienes debían juzgar en los exámenes de Noche Triste de abogados y licenciados en Cánones. Este documento constituye una de las pocas fuentes que documentan la existencia de los exámenes de Noche triste y el Claustro Académico Ambo Jurista del ICAE, pues no se ha hallado mayor información sobre ellos.
Otro documento del acervo del Archivo Histórico, detalla la terna que el Consejo de Gobierno forma para dar cumplimiento al Artículo 19, del decreto de 26 de Agosto de 1826. Dicho decreto incluía los lineamientos para el empleo del Director del Instituto de Ciencias y Artes de la Capital. Esta terna fue encabezada por el Licenciado Benito Juárez, seguido por José Juan Canseco y por Juan Nepomuceno Bolaños, con fecha del 8 de Noviembre de 1848 y está vinculada con dos documentos más, ambos del 9 de Diciembre del mismo año.
En el primero, el Licenciado Benito Juárez solicita que se le otorgue licencia para concluir sus actividades como Gobernador del Estado (esta solicitud fue presentada antes de hacerse cargo de la mencionada dirección), argumentado problemas de salud y no poder cumplir con cabalidad dicho puesto por las múltiples ocupaciones que le exigía representar el poder ejecutivo de Oaxaca. Sin embargo, el segundo documento es una comunicación que Benito Juárez dirige al Secretario del Despacho, en la que agradece su postulación y reafirma su compromiso con el puesto conferido.
El último documento que abordaremos, es una designación que realiza Benito Juárez al Licenciado Marcos Pérez, como Director Provisional del ICAE, con base a los decretos del 14 de Enero de 1856 y del 29 de Julio de 1852. Este documento da cuenta de que la designación del Director del ICAE, era realizada por el gobierno estatal en turno. En la hoy actual Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, se realizan elecciones para que la comunidad estudiantil elija a su Rector.
Como se puede apreciar, los registros documentales son una ventana para el conocimiento de implicaciones de la formación superior con la conformación de las clases políticas. Este vínculo marcó una época en la vida estatal y nacional. Y en el Archivo histórico del AGEO se pueden consultar los procesos que le dieron forma a este y otros fenómenos de la vida cotidiana.
Por Stella Camargo
El Departamento de Reprografía, se encarga de digitalizar el acervo del Archivo Histórico con fines de conservación, consulta y difusión.
Entendiendo la reprografía como el “conjunto de técnicas que permiten reproducir por copia o por duplicación un documento original sobre un soporte ordinario o especial”, hablaremos hoy de la fotografía.
Escribiendo con luz
Fotografiar es plasmar una imagen utilizando como pincel el sol. Etimológicamente photo es luz y grafos, escribir o dibujar, así, la fotografía es “La técnica y arte de fijar, por acción de la luz y mediante una cámara oscura (cámara fotográfica), la imagen de los objetos sobre una superficie tratada con una emulsión fotosensible”, la fotografía también se conoce como Heliografía (Helios significa sol). Los resultados de esta técnica son imágenes perdurables de la realidad lumínica cuya duración varía de acuerdo con la época y la técnica empleada.
La fotografía es una de las técnicas de reproducción por copia, (las otras son la xerografía o fotocopia, la microfilmación -de la que ya hablamos en un artículo pasado- y la digitalización).
La importancia de la fotografía en el proceso de reprografía de un archivo, radica en que la copia (foto) conserva exactamente las cualidades del original, el inconveniente es que pierde los valores primarios (administrativo, legal, contable o fiscal) y los secundarios (informativo testimonial y evidencial).
Antecedentes
Los seres humanos han querido desde siempre perdurar en el tiempo y trascender, plasmar dibujos en las cavernas fue una manera de hacerlo. La búsqueda por hacer una copia casi perfecta del entorno dio pie a grandes inventos entre ellos la fotografía como una de las tantas formas de representación objetiva de la realidad.
Un poco de historia
El desarrollo de la fotografía ha ido desde la utilización de gases tóxicos como el mercurio, las sales de plata, hasta el uso de las claras de huevo para la técnica de albúmina; del blanco y negro, pasando el cian (azul), el sepia, hasta lograr el color que tardó años en ser descubierto.
La fotografía mantuvo los principios físicos y químicos inherentes a ella a lo largo de su evolución, desde su nacimiento, hasta mediados de los años 70 del siglo XX con la aparición de la fotografía digital, donde el principio de la cámara oscura permanece, pero la química desaparece. Algunas personas entonces sentenciaron la muerte la fotografía.
En los años ochenta, los editores de imagen y el internet, revolucionaron aún más a la fotografía. Dice David Iglesias Franch que “La fotografía química es un estandarte de la modernidad, mientras que la imagen digital pertenece a la posmodernidad”.
La fotografía y el archivo.
Todas las fotos del Archivo Histórico son fotografías químicas. El acervo con el que cuenta la fototeca del AGEO y de los fondos documentales da cuenta de la filiación de las personas, de eventos de instrucción pública, de milicia o de justicia, en fotos hechas con la técnica de albúmina, colodión, cianotipia, Van Dyke y plata gelatina; también hay negativos en acetato de celulosa y en vidrio. Toda esta fotografía química se va a digitalizar.
Fotografía digital y desmaterialización.
La fotografía digital tiene la información codificada en bits, que precisa de un dispositivo que la decodifique para acceder a ella. Al digitalizar los documentos, estos cambian el soporte de papel por el soporte digital, es decir, se desmaterializan y de esta forma se protegen los originales de muchos tipos de daño. Cuando el documento por su tamaño no cabe en el escáner, se digitaliza con cámara digital en un tripié jirafa. El proceso de desmaterialización es la ausencia de una estructura física de la imagen. En este caso, el soporte físico es circunstancial y no influye en la imagen misma. La digitalización que se hace en el AGEO por razones de autenticidad va sin ningún tipo de retoque con programas de edición de imagen, de modo que se evidencian manchas, roturas, daño en las tintas, en el color y más.
Las ventajas de la fotografía digital son mayor acceso a las imágenes y mayor difusión por la posibilidad de ser publicadas en Internet.
Con la digitalización surgen ciertos puntos críticos como el concepto de “autenticidad legal” de la imagen, el acceso a ella, la idea de “original” y “copias” etcétera. Desafortunadamente no se ha legislado sobre archivos digitales para resolver estos interrogantes.
Los documentos que resguarda el AGEO dan cuenta de procesos administrativos acaecidos en Oaxaca que validan la Historia del Estado, nuestro acervo es patrimonio histórico de la nación y en caso de pérdida o daño, es irrecuperable, es por esto que se está digitalizando. Sin archivos ordenados no hay transparencia, ni historia, ni cultura.
Por Irma Lidia Zárate Cruz.
Los cambios importantes que se dieron en la educación durante la Presidencia de Álvaro Obregón y de José Vasconcelos como responsable de la recién creada Secretaria Educación Pública en el año de 1921, ostentan el inicio de una cruzada contra el analfabetismo a favor de la educación indígena, buscando corregir y fomentar las virtudes de la niñez y educar a las poblaciones más necesitadas a nivel cultural, dirigida tanto a los maestros rurales, como a la población adulta.
Al realizarse la campaña de alfabetización a nivel federal, esperaban cubrir todo el territorio con las “Misiones Culturales”, cuyo objetivo fue formar maestros dinámicos capaces de hacer evolucionar el medio rural, principalmente en el aspecto económico, enseñándoles oficios como la agricultura, carpintería, curtiduría, pintura, entre otros. Este programa permaneció con gran éxito hasta después de 1930.
En el Archivo Histórico del AGEO, se han encontrado documentos que hacen referencia a las sesiones culturales, organizadas por los profesores, quienes mandaban un informe detallado de todas las actividades realizadas durante ellas, donde incluían los programas ilustrados con fotografías alusivas, con la finalidad de comprobar ante la Secretaria de Educación, sus actividades y trabajos.
Una de las más interesantes que hemos encontrado, es sobre el segundo Instituto Educativo Social Mixteco, este expediente nos muestra detalladamente los trabajos realizados por los maestros, exponiendo sus proyectos educativos, la enseñanza de varios oficios y la muestra de fotografías ilustrativas que a pesar del tiempo, están muy bien conservadas, el expediente cuenta con un total de 36 fotografías donde se puede constatar lo que los profesores manifiestan en su informe.
Esta sesión en particular no solo llama la atención por las fotografías, sino por la bienvenida que se le dio al Gobernador interino, el Lic. Genaro V. Vásquez, donde todos los alumnos del Instituto salieron a recibirlo recorriendo las principales calles de Tlaxiaco, cantando las mañanitas. Esta sesión fue trascendente ya que dio inicio desde el 27 de enero al 4 de marzo de 1928. El instituto contó con la presencia del Jefe de Educación Pública del Gobierno del Estado y del Jefe de la Misión Cultural de la Mixteca, el Profesor Policarpo T. Sánchez, quien hizo entrega de diplomas a los ganadores del concurso de gramática. A este Instituto se le hizo entrega de una pequeña Biblioteca Pedagógica, como parte de la conmemoración del Día del libro en la semana social del propio Instituto.
Se llevó acabo la fiesta inaugural del parque recreativo Infantil Tlaxiaquense, construído gracias a los esfuerzos del Instituto. Los alumnos elaboraron un quiosco y las alumnas de gimnasia realizaron varias tablas rítmicas, también se mostraron los trabajos hechos por los alumnos y se festejó el día del niño, con la participación de los padres de familia en estas actividades. El Instituto Educativo Social Mixteco hizo una gran labor, los maestros dieron muestra de sus esfuerzos y trabajo constante en la educación y desarrollo de las comunidades rurales, enseñando a sus alumnos varios oficios, desde cómo preparar la tierra para sembrar, hasta la curtiduría de pieles, a las niñas se les daban clases de tejido, conserva de frutas y conocimientos en primeros auxilios.
Dentro de este gran acervo histórico con que cuenta nuestro estado, podrán encontrar mucha información, que muestra la transformación de la educación durante el siglo XIX hasta la mitad del siglo XX, desde los programas de estudio de los profesores, hasta la aplicación de los exámenes públicos en presencia de todos los pobladores de una comunidad o distrito.
Sin archivos ordenados no hay cultura, ni historia, ni transparencia. Los invitamos a conocer este y otros testimonios documentales del Archivo General del Estado de Oaxaca.